Estás una mañana trabajando, peleando con reactivos que se niegan a dar la coloración que la etiqueta promete que darían al aplicarse a las sustancias problema; explicando una y otra vez lo mismo a estudiantes que de todas formas no terminan de poner atención... calor para repartir... de pronto... alarma, caos, ruido, voces y la gente corriendo hacia las canchas. Alguien me dice "hay una amenaza de bomba" entonces salimos lo más ordenadamente posible hacia la zona segura (?).
En menos de diez minutos, policías con armas largas (supongo que para ametrallar a la bomba), pasamontañas... personal de protección civil que recorre las instalaciones en un simulacro de trabajo; profesoras nerviosas, chicos reportándose a su casa para preguntar si ha salido algo de este incidente en los medios... y después de una hora y media (y de un partido de básquet entre los más relajados) la paz vuelve en medio de un: "fue una falsa alarma, ya lo sabíamos, pero teníamos que revisar). La psicosis, la paranoia, nos han invadido una vez más en menos de dos semanas.
Vaya mundo de locos en que nos han convertido a este pobre planeta.
En menos de diez minutos, policías con armas largas (supongo que para ametrallar a la bomba), pasamontañas... personal de protección civil que recorre las instalaciones en un simulacro de trabajo; profesoras nerviosas, chicos reportándose a su casa para preguntar si ha salido algo de este incidente en los medios... y después de una hora y media (y de un partido de básquet entre los más relajados) la paz vuelve en medio de un: "fue una falsa alarma, ya lo sabíamos, pero teníamos que revisar). La psicosis, la paranoia, nos han invadido una vez más en menos de dos semanas.
Vaya mundo de locos en que nos han convertido a este pobre planeta.
